09 Aug Recibí la vacuna COVID-19, y tu también deberías recibirla
(Foto por CDC / Unsplash)
Por Adrianne Ramsey
Recibí mi primera dosis de la vacuna COVID-19 la semana pasada. Tu también deberías.
Mientras caminaba hacia la farmacia en la parte trasera de Safeway, no podía creer que pude reservar una cita.
Las vacunas comenzaron a mediados de diciembre, lentamente. Creo que todos podemos estar de acuerdo en que el comienzo del lanzamiento de la vacuna en California no fue nada fácil. Durante las primeras seis semanas de vacunación, California ocupó constantemente un lugar bajo en el suministro, la distribución y la accesibilidad de las citas.
Durante el año pasado, se le ha dicho al público que las vacunas asegurarán la luz al final de este túnel pandémico. Así que era comprensible que tanta gente se sintiera frustrada por las confusas actualizaciones de nuestro gobierno estatal con respecto a los niveles de elegibilidad e incluso cómo inscribirse para una vacuna.
A fines de enero, el condado de Contra Costa tardó dos semanas y media en aprobar a mi madre para una cita de vacunación, a pesar de que ella es elegible como parte del grupo de 65+. Sin embargo, a mediados de febrero, el despliegue mejoró drásticamente debido a la ampliación del suministro y los sitios de vacunación. La aprobación de la vacuna COVID-19 de una dosis de Johnson & Johnson también ha ayudado el asunto.
Las personas de 16 a 64 años con problemas de salud preexistentes se hicieron elegibles el 15 de marzo. Finalmente, pude inscribirme para una cita. Para mi alegría, estaba en el sitio web de la farmacia Safeway en el momento adecuado y rápidamente reservé un lugar. Cuando volví a consultar una hora más tarde, por curiosidad, todas las citas de esa semana estaban llenas.
Llamé a la farmacia y pregunté qué vacuna llevaban. La recepcionista me informó que era Moderna. Al principio, estaba decepcionada. La eficacia de Moderna es excelente (94%), pero esa no era mi preocupación.
Mi madre recibió dos dosis de la vacuna COVID-19 de Moderna. Ella acababa de completar el proceso de vacunación de seis semanas cuando recibí mi primera dosis. Por lo tanto, pude ver los efectos secundarios que experimentó. Después de la primera dosis, tuvo dolor en el brazo de forma intermitente durante una semana, tuvo mucho moqueo nasal durante un par de días y estaba cansada. Pero después de la segunda dosis, experimentó un día de escalofríos, fuerte dolor de cabeza y fatiga; pasó la mayor parte del día en la cama, pero recuperó la energía al anochecer.
Si bien estaba plenamente consciente de las experiencias de las personas con la segunda dosis, ver a mi madre experimentar estos efectos secundarios fue sorprendente. Por lo tanto, estaba muy nerviosa de que Moderna tuviera los mismos efectos en mi cuerpo. Contemplé cancelar e intentar encontrar un sitio que tuviera Pfizer y/o Johnson & Johnson, pero mi mamá me recordó lo difícil que es conseguir una cita y me aseguró que estaría bien, porque ella también estaba bien.
Y estaba bien. Estoy más que bien. Estoy genial.
Afortunadamente, no había cola en la farmacia. Había imprimido y llenado mi papeleo antes de la cita, por lo que el procesamiento fue muy rápido. Antes de darme cuenta, estaba en la habitación y me inyectaron en el músculo del brazo izquierdo. Hubo un pequeño pinchazo, pero eso fue todo. Después de esperar quince minutos en la sala de espera y enviar mensajes de texto con alegría a mis amigos diciéndoles que había recibido mi primera dosis, me dirigí a casa.
Mis únicos efectos secundarios fueron dos días de dolor en el brazo y una ligera presión en los senos nasales y poca energía el primer día. Si bien estoy nerviosa por recibir la segunda dosis en un mes, estoy muy agradecida de haber comenzado el proceso de vacunación contra el COVID-19. Realmente animo a todos a que hagan una cita tan pronto como sean elegibles y se vacunen. No es nada que ninguno de nosotros no pueda manejar, y realmente se siente como si estuviéramos casi en la luz al final del túnel.
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